El Vivar de Fuentidueña, 28 de noviembre de 2009.
La hora de comer llegó, y a eso de las tres de la tarde nos hicimos la foto del grupo, pescadores y acompañantes junto al ya citado Santiago, con la seguridad de que volveremos. A partir de este momento, los adeptos de degustar una buena comida fueron mayoritarios, tal vez ganaron por unanimidad, y nos encaminamos al asador de Rufino, a orillas del río Duratón, junto al puente de Fuentidueña, dando buena cuenta del cordero asado, aunque algunos prefirieron cochinillo que previamente había recibido el mismo trato. Sencillamente exquisito.
En definitiva, buenas sensaciones en una excursión de pesca que estamos deseando repetir, como los estudiantes malos.
Porque ya es tradición, porque nos gusta y porque al fin y al cabo, somos un Club de Pescadores, hoy nos hemos reunido a hacer dos de las cosas que más nos gustan: Pescar y comer bien.
Informa desde Ávila:
Luis Trujillo.
Presidente del Club Deportivo de Pesca Valle Iruelas-Ávila.
Presidente del Club Deportivo de Pesca Valle Iruelas-Ávila.
La reunión ha sido en “El Vivar de Fuentidueña” (Segovia) www.lagodepescavivar.com/pescasinmuerte/ . Un buen “reservorio” de pesca donde como en otras ocasiones nos atendió Santiago, el encargado de cuidar el lugar y las abundantes truchas Arco iris que lo pueblan.
En cuanto a la pesca, todos pescamos algo, y algunos mucho y de buen tamaño, siendo los participantes trece adultos y cuatro chicos. Las truchas entraron francas con Streamers, ninfas, moscas secas e incluso algún Popper más propio de la pesca del Black bass. En acción de pesca, estuvimos 17 personas, de las que 13 eran adultos y cuatro chavales, y alguno de ellos nos dio lecciones a los adultos, cosa normal últimamente.
La hora de comer llegó, y a eso de las tres de la tarde nos hicimos la foto del grupo, pescadores y acompañantes junto al ya citado Santiago, con la seguridad de que volveremos. A partir de este momento, los adeptos de degustar una buena comida fueron mayoritarios, tal vez ganaron por unanimidad, y nos encaminamos al asador de Rufino, a orillas del río Duratón, junto al puente de Fuentidueña, dando buena cuenta del cordero asado, aunque algunos prefirieron cochinillo que previamente había recibido el mismo trato. Sencillamente exquisito.
Dado que entre el grupo, se encontraba la junta directiva del nuevo Club “Mosqueros del Tormes” (Salamanca), aprovechamos el evento para desearle lo mejor en su nueva andadura, algo que damos por seguro ya que con Paco y Tasio Redondo, Cesáreo y Javier, pensamos que el éxito está garantizado.
En definitiva, buenas sensaciones en una excursión de pesca que estamos deseando repetir, como los estudiantes malos.
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